La primavera suele ser sinónimo de alegría: vuelve el sol y los días son más largos. Pero para los jinetes, la estación puede convertirse rápidamente en una pesadilla. Insectos, dermatitis, laminitis... ¿Cómo evitarlos?
Seaver te da sus consejos y trucos para gestionar tu caballo durante la primavera.

Insectos

Los insectos son una verdadera molestia para los caballos en esta época del año. Para algunos caballos, todos los insectos que habrá alrededor serán una fuente de estrés. Pero el problema no acaba ahí. Los insectos también pueden causar picor tras la picadura, transmitir enfermedades o provocar sobreinfecciones...

Para limitar las molestias al caballo, existen productos (champús, sprays, etc.), máscaras y camisas contra las moscas. También es aconsejable sacar a los caballos al final del día, cuando hay menos insectos.

Hay que tener especial cuidado con las orugas, que son peligrosas para los caballos. Las garrapatas también son peligrosas, ya que transmiten enfermedades (piroplasmosis o enfermedad de Lyme).

Algunos caballos también pueden sufrir dermatitis. En particular, cuando son muy sensibles o incluso alérgicos a la saliva o a las picaduras de determinados insectos. Los caballos con EDS (Dermatitis Estival Recurrente Equina) se rascan (a menudo en el cuello y en la parte superior de la cola), a veces hasta el punto de sangrar. Por eso, proteger al caballo de los insectos es importante en muchos sentidos.

Alergias

Al igual que nosotros, los caballos pueden sufrir alergias. El polen, por ejemplo, suele ser la causa de molestias respiratorias y tos en algunos caballos un poco sensibles. Por lo tanto, es necesario vigilar, sobre todo en el caso de los caballos que salen mucho, la presencia de flores y polen en los prados. Hablando de flores, por supuesto también debe comprobar que los prados no contengan plantas o árboles tóxicos para los caballos (tejo, adelfa, tuya, bellotas de roble, etc.), y prestarles atención cuando esté fuera para evitar intoxicaciones que puedan enfermar al caballo (algunas plantas son incluso mortales para el caballo si se ingiere cierta cantidad).

Saber qué plantas son tóxicas para los caballos y cómo identificarlas es importante para evitar que el caballo las coma y poder reaccionar rápida y correctamente en caso de intoxicación. Averigüe qué especies son tóxicas para los caballos en el sitio web del ifce.

Hierba de primavera

Otro "problema" de esta temporada es el césped. Por supuesto, a todos los caballos les gustará tener hierba para pastar. Pero aunque es importante para la dieta del caballo, la hierba de principios de primavera es muy rica. Esto puede hacer que su caballo enferme si no se toman ciertas precauciones. Alimentar al caballo con heno antes de salir y/o dejarlo en el prado contribuirá a que coma menos hierba.

También es importante restringir el tiempo de pastoreo. Los caballos que han estado estabulados todo el invierno necesitarán rehabilitación. Recomendamos volver a sacar a los caballos a pastar gradualmente. Primero 30 minutos, luego 1 hora, etc. Esto ayudará a evitar el riesgo de cólicos. También puedes ponerlo en una cesta para evitar que coma hierba.

Además, como esta hierba es muy rica en potasio pero baja en magnesio y sodio, esto puede crear problemas a algunos caballos y requerir un suplemento de magnesio para compensar el desequilibrio. También contiene poca fibra, por lo que la ingesta de heno es aún más importante. Para evitar un desequilibrio de la flora digestiva, que puede provocar cólicos, también es aconsejable incluir alimentos ricos en hidratos de carbono y celulosa, como la avena y la cebada.

Los caballos también pueden infectarse con parásitos al ingerir huevos mientras pastan. Un caballo con una infestación parasitaria perderá peso debido a los gusanos. Por lo tanto, es importante desparasitar regularmente a los caballos y limpiar los pastos para evitar este problema.

Por último, la hierba abundante ingerida en exceso puede provocar laminitis (inflamación de la pezuña). Un caballo con laminitis puede reconocerse por su postura y su forma de andar. Permanecerá postrado, tendrá dificultades para caminar y apoyará su peso en los cuartos traseros. Por ello, una vez más, es importante vigilar al caballo. Aquí especialmente su poni porque los ponis se ven mucho más afectados por la laminitis. Es especialmente importante analizar su consumo de hierba en esta época del año.

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El equipo Seaver