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          7 consejos para que su caballo haga frente a la ola de calor

          martes, 20 junio, 2017

          En los últimos días hemos sufrido una intensa y prolongada ola de calor. Seaver le da 7 consejos para ayudar a su caballo a hacer frente a la ola de calor. Varias regiones han sido declaradas en alerta naranja, con temperaturas muy por encima de lo normal. Al igual que nosotros, los caballos sufren el calor.

          Ya sea en un establo o en el prado, es importante utilizar el sentido común. Aquí tienes algunos consejos para proteger a tu mascota cuando hace mucho calor.

          1. Hidratar todo lo posible

          Para los caballos, como para los humanos, la hidratación es esencial. Por término medio, un caballo bebe entre 20 y 40 litros de agua al día. Cuando hace mucho calor, duplica su ingesta y puede beber hasta 100 litros de agua. Por lo tanto, no olvides proporcionarle agua limpia en abundancia. Si tu caballo está estabulado, no olvides comprobar el estado de su bebedero. Debe estar siempre lleno y limpio, ya que el agua se estanca rápidamente con el calor. Sin embargo, cuidado con el agua muy fría, que puede provocar cólicos.

          2. Administrar electrolitos

          A pesar del calor y la fuerte sudoración, algunos caballos no se hidratan lo suficiente. Dale a tu caballo una piedra de sal. Si lame la sal, su caballo beberá más y evitará el riesgo de deshidratación. También puedes darle agua con un poco de sal añadida, o electrolitos disponibles en tu veterinario o en tiendas de artículos para el caballo.

          3. Ducharse regularmente

          El agua es una de las mejores formas de refrescar el cuerpo de tu caballo. Para calmarlo y bajar su temperatura corporal, no dudes en ducharlo varias veces al día si es necesario.

          4. Piensa en la comodidad

          Si tu caballo vive en pastos, asegúrate de que pueda resguardarse del sol bajo árboles o un refugio. Para los caballos que viven en el interior, mantén las puertas de los establos o las persianas de los boxes ligeramente entreabiertas para mantener el calor fuera y permitir al mismo tiempo que circule el aire. Los ventiladores son una excelente forma de mantener el aire en movimiento en los establos, pero utilízalos con criterio. Si puedes, saca a tu caballo al exterior por la noche. Así se beneficiará del aire fresco de la noche y le molestarán menos los insectos.

          5. Aplicar crema solar

          Algunos équidos son más sensibles al sol que otros, sobre todo los que presentan una despigmentación de la piel conocida como ladre. Estos caballos corren más riesgo de sufrir quemaduras solares y deben protegerse de los rayos UV. Por lo tanto, protéjalos con crema solar SPF 50 en las zonas afectadas (punta de la nariz, percebes).

          6. Protegerlo de los insectos

          A altas temperaturas, los caballos regulan su propio calor corporal mediante el sudor. Este sudor es especialmente apreciado por insectos como moscas, mosquitos y tábanos, ya que es muy salado. Para ayudar a proteger a tu caballo, considera la posibilidad de utilizar repelentes de insectos, mascarillas o camisas antiinsectos.

          7. Limite sus esfuerzos

          Lo mejor es ralentizar el ritmo de trabajo con tu caballo. Las altas temperaturas combinadas con el esfuerzo podrían poner en peligro la salud de tu caballo. Lo ideal es realizar sesiones más cortas en las horas de menos calor y vigilar de cerca la frecuencia cardiaca de tu caballo (debe rondar las 120 lpm). Es aconsejable preferir el picadero a la arena. También es un buen momento para dar un paseo y refrescarse entre la maleza.

          Hasta pronto para otro artículo,

          El equipo Seaver